Castillo de Miranda


Castillo de Miranda

Castillo de Miranda


Código: Z-CAS-103
Comunidad: Aragón  |  Provincia: Zaragoza
Municipio: Zaragoza  |  Localidad: Juslibol


Situación

El Castillo de Miranda se alza sobre un cerro rocoso, denominado el Cabezo de Miranda, a unos 2 kilómetros al noroeste de Juslibol, en el margen izquierdo del Ebro, en el espacio natural denominado el galacho de Juslibol, a poco más de 5 kilómetros de la ciudad de Zaragoza, municipio de Zaragoza, provincia Zaragoza.

Para llegar a la fortaleza hay que dirigirse desde Juslibol hacia la entrada del espacio natural del galacho. Está bien indicado. A unos 500 metros de Juslibol hay una barrera que impide el acceso a vehículos de motor. Desde este punto, ya andando, en unos 10 minutos caminando junto a los cortados de Juslibol se llega a una caseta. En ese punto se observan unas escaleras de madera a la derecha. Tras subir por las escaleras, se llega a un sendero que pasa por encima de los cortados, que nos lleva en unos 20 minutos a la fortaleza.


Historia

El primer asentamiento en el Cabezo de Miranda se remonta a un poblado ibérico datado en la Edad de Hierro, del que se conservan actualmente algunos restos.

En época romana, durante la gobernación del emperador Augusto, el poblado fue abandonado por la importancia adquirida por Caesaraugusta, la Zaragoza romana.

Es posible que, durante la dominación musulmana de la península, los moros construyeran una primitiva fortificación en el Cabezo de Miranda.

El castillo de Miranda fue ordenado construir por el rey aragonés Pedro I, tras las campañas de Aragón por el valle del Ebro de finales del siglo XI, principio del XII, a fin de amenazar, hostigar, y intimidar la gran y poderosa Saraqusta, la Zaragoza musulmana, y para que sirviera de apoyo en una futura reconquista cristiana de la ciudad blanca.

Emplazado al borde un cabezo rocoso en el margen izquierdo del Ebro, y a escasa distancia de Saraqusta, gozaba de potencial estratégico, pues desde su posición privilegiada controlaba la vega del Ebro hasta la ciudad de Zaragoza, y a la misma capital de la Marca Superior de al-Ándalus, con la que tenía contacto visual.

Desde prácticamente las inmediaciones de Zaragoza, existió a finales del siglo XI una línea fortificada avanzada cristiana al noroeste de la ciudad, constituida por varias fortificaciones situadas en el margen izquierdo del Ebro, que llegó a abarcar más 20 kilómetros, hasta Remolinos, cerca de Tauste.

Desde estas posiciones fortificadas los cristianos aragoneses intimidarían y hostigarían Saraqusta, y coordinarían la futura reconquista de la ciudad blanca.

Miranda formó parte de las posiciones avanzadas aragonesas. Estaba acompañado al este por el cercano castillo de Juslibol, éste el más cercano a Zaragoza tras la conquista aragonesa de la plaza en 1101. Al noroeste contaba, por orden de posición, con Alfocea, la torre de Candespina de Sobradiel (de origen musulmán), en posición más atrasada El Castellar, una de las principales plazas fortificadas avanzadas de Aragón, o el castillo de Pola en Remolinos, de origen moro y aprovechado por Aragón tras su toma a éstos.

En 1118, el rey Batallador, Alfonso I de Aragón, se sirvió del castillo de Miranda como punto de apoyo y coordinación durante la campaña de la reconquista de Zaragoza, por su cercanía a la ciudad.

Después del asedio aragonés a la capital de la Marca Superior de al-Ándalus, desde mayo hasta diciembre de 1118, Saraqusta capitula, y es entregada a Aragón. En el siglo siguiente, ya perdido su valor militar, Miranda se convertiría en castillo señorial, en el siglo XIII. En algún momento desconocido de los siglos siguientes, el castillo se convirtió en ermita (ermita de la Virgen de Miranda), agregada a la parroquia de Juslibol. Su uso duraría hasta el siglo XIX. Desde entonces la fortaleza ha estado abandonada, lo que ha precipitado su estado de ruina.


Descripción

El castillo estaba compuesto por un pequeño recinto de planta rectangular de unos 15 por 20 metros de lados, e irregular, adaptándose a las condiciones del terreno.

Se conservan lienzos rebajados de la muralla que rodeaba la fortaleza así como de algunas estancias que componían la fortificación, y de su entrada, muy deteriorada. Destacan los restos de una de las torres.

El flanco noroeste estaba defendido por una torre albarrana de planta rectangular, hoy en ruinas y bastante mal estado.

Todo el conjunto fue construido con encofrado de mortero de yeso y piedras irregulares. Se observan refuerzos de ladrillo en algunas partes, posiblemente de cuando la fortificación fue utilizada como ermita.

Desde la fortaleza se pueden contemplar una espectaculares vistas del espacio natural del galacho de Juslibol, el río Ebro y la ciudad de Zaragoza.


Estado de conservación

Se encuentra en estado de ruina.


Protección

Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.


Alrededores

Más información sobre Castillo de Miranda en Monumentalnet (www.monumentalnet.org).
Más información sobre la localidad de Juslibol en Monumentalnet (www.monumentalnet.org).
Más información sobre el municipio de Zaragoza en Monumentalnet (www.monumentalnet.org).
Más información sobre la provincia de Zaragoza en Monumentalnet (www.monumentalnet.org).
Más información sobre la comunidad de Aragón en Monumentalnet (www.monumentalnet.org).

Fuentes y otras webs de interés


Fortificaciones próximas


CastillosNet agradece la colaboración de Luis Puey Vílchez

Fecha de última modificación: 26/08/2024





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